sábado, 27 de abril de 2019

Votemos

Les imagino enterados de que el próximo domingo se celebran Elecciones Generales. Ya saben, toca votar. Yo les deseo que lo hagan con libertad, con la que les dejen sus convicciones, sus miedos, sus servidumbres, sus conocimientos, sus fobias… y todo aquello que consciente o inconscientemente supone una limitación a esa deseable y presumible libertad.
Votar no es obligatorio, pero es aconsejable. Más en momentos como el actual, en tiempos como el que vivimos donde como bien señalan algunos políticos de diferentes partidos se trata de “sí España retrocede o avanza”. De mirar al futuro y apostar por él o de volver la vista atrás y regresar a un pasado que ya, por lo menos algunos, creíamos o deseábamos superado.
No les voy a decir a quién deben votar. No les voy a pedir el voto para partido alguno. Ya se encargan muchos otros de practicar el proselitismo con desigual fortuna y discutibles artes. Comprenderán que bastante tengo con responsabilizarme de mi propio voto como para cargar con el suyo y asumir sus aciertos o, sobre todo, sus errores.
Solo les voy a pedir que reflexionen, todavía hay tiempo para ello, y que respalden con su voto a partidos democráticos. No sucumban a la tentación de la manzana ponzoñosa que les ofrece la serpiente para arrastrarles, a ustedes y al resto de nosotros, a un pozo oscuro.
Hay que distinguir entre la indecisión y la duda. Se puede estar indeciso sobre votar a un partido o a otro, pero no hay duda respecto a los partidos a los que nunca votarías. Decídanse, pero no duden. A un partido antidemocrático no se le puede ni se le debe votar. No merece estar representando en el Parlamento.
También pueden no votar. Porque la abstención, guste o no, es una forma de expresarse y de mostrar rechazo o desacuerdo. O pueden emitir un voto blanco o nulo. Ello no les inhabilita para opinar o quejarse como aseveran algunos. Pero sí les deja en una posición de desigualdad frente al que participa. 
Yo voy a votar el domingo. Es cierto que me gustaría que hubiera listas abiertas, limitación de mandatos y participación de los ciudadanos más allá de acudir a las urnas cada cierto tiempo y depositar el voto. Aún así, yo voy a votar el domingo y voy a votar por el futuro de mi país, por el progreso.
Por cierto, cuando vayan a ejercer su voto al Senado piensen porqué nuestros alcaldes afirman que no hay nada comparable a ser alcalde de Jaén y a la mínima ocasión se dan a la fuga. Yo quiero para mi ciudad un alcalde a tiempo completo. Y lo quiero en la plaza Santa María, no en la plaza de la Marina de Madrid. O vamos a rólex o vamos a setas.

 Mi artículo para SER Jaén, "La Colmena", del 25 de abril de 2019.


No hay comentarios:

Publicar un comentario