viernes, 8 de mayo de 2015

Votantes

De las autonómicas a las municipales. Y de las municipales a las generales. De elecciones a elecciones y voto porque me lleva la corriente.
Porque ahora somos votantes. Nos han privado hasta de la condición de ciudadanos. Por las connotaciones con el partido de Albert Rivera. Ese as en la manga del poder en la sombra, al que todos asocian ya con el IBEX-35 y ven como relevo del Partido Popular.
Andalucía era el laboratorio. Y los andaluces, los conejillos de indias. Así, hemos pasado del triunfo histórico del PSOE, de la mayoría sólida y el gobierno estable proclamados en la euforia de la noche electoral a la confirmación de que la presidenta no tiene quién la vote.
¿Todo vale para mantener el poder? ¿cómo explicar ahora la ruptura con Izquierda Unida cuando la alternativa es el acuerdo con Ciudadanos, una derecha con tintes xenófobos?
¿Cuál es el precio? ¿la cabeza de los ex presidentes adornando el salón de los nuevos ricos? ¿un nuevo pacto contra la corrupción ahora que Andalucía era transparente y casi pura?
¿Y cuál es el futuro? ¿inestabilidad e incertidumbre hasta las elecciones generales y después, una nueva votación en Andalucía? ¿o quizás, el sueño europeo del pacto PSOE-PP para que todo siga igual? Tú, en Madrid, y yo, en Sevilla, y nadie nos mueve las sillas.
Podría ser. Pero en el horizonte está el 24 de mayo. Y conviene recordar que fueron unas elecciones municipales las que cambiaron el curso de la historia en España.
¡Ojo al parche! Y aviso a navegantes, se tambalean los consistorios de Madrid y Barcelona. ¿qué no pasará en Andalucía?
En Jaén se empeñan en extrapolar los resultados de las autonómicas a esas municipales de mayo. El PSOE se ve vencedor; el PP solo piensa en la capital; Izquierda Unida espera que ahora castiguen a otro, y Podemos, bajo distintas marcas y compañeros de viaje, y Ciudadanos saben que cualquier resultado es bueno. A UPyD ya no se les espera y el PA continúa su viaje a ninguna parte.
Los alcaldes serán producto de la aritmética. Pero entre sumas, restas, multiplicaciones y divisiones, nadie esconde que lo que está en juego y el objetivo principal es la Diputación.
Tendríamos que botarles a todos. Con "b" de bota. Pero al final les votaremos. Con "v".

 Artículo emitido en SER Úbeda el 5 de mayo de 2015.

1 comentario:

  1. Hay otra forma de provocar el CAMBIO ,una GRAN abstención , para decirles que no nos gusta este sistema partitocratico , que necesitamos , que queremos una democracia real , y no votar cada cuatro años a unas listas confeccionadas solo por ELLOS . Un cordial saludo

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