miércoles, 30 de junio de 2010

"Pierodistas"

Uno de mis peques dice sin rubor y con absoluto desconocimiento de lo que dice, con independencia de cómo lo diga, que sus padres son “pierodistas”. Oírlo de su boca, además de arrancar la consabida sonrisa, enorgullece; del mismo modo que es un orgullo ejercer la profesión que se ha elegido y para la cual uno se ha formado.
En demasiadas ocasiones, el periodismo y los periodistas son objeto de mofa, crítica y descrédito en las sociedades modernas. Y en algunas de esas ocasiones los ciudadanos llevan razón en su apreciación sobre la profesión y los profesionales que la ejercen. Aunque sería de agradecer la misma mofa, crítica y descrédito para otras profesiones que como ésta tienen malos profesionales y gente sin decencia ejerciéndolas.
Frente a esas profesiones, tan poco dadas a la crítica o a la denuncia de las malas praxis, el periodismo, tachado erróneamente de corporativista, asume que la crítica no sólo procede de fuera, sino que tiene su origen en la propia profesión. Porque actuaciones puntuales nos avergüenzan y lo hacen por partida doble, como ciudadanos y como profesionales.
El Campeonato del Mundo de Fútbol que se está celebrando en Sudáfrica nos ha brindado uno de esos momentos de bochorno profesional. Y los periodistas, en lugar de dar la callada por respuesta o mirar hacia otro lado, exponemos en la plaza pública a aquel que desde la profesión nos causa sofoco y provoca esa mofa, crítica y descrédito en la sociedad.
Ya conocen la historia, una periodista está en Sudáfrica cubriendo el torneo para una cadena privada de televisión de España. Es decir, ejerciendo su profesión como el resto de periodistas españoles y extranjeros. El pecado de esta periodista es ser la actual pareja del capitán y portero titular de la Selección Española y haber abandonado una cadena de televisión privada, La Sexta, para fichar por otra, Tele 5.
Estos mimbres y la ubicación de la periodista en el césped tras la portería española, lugar designado por la FIFA para los periodistas de las televisiones con los derechos de emisión del Mundial, sumados a una repentina atención por parte de los tabloides sensacionalistas británicos por su relación con el capitán de la Selección, han llevado a otro periodista, que representa a los periodistas de Madrid y ha representado durante años a los del resto de España, a agredir verbalmente a esa periodista, acusando a su cadena, Tele 5, de “maltrato” y calificando de “vergüenza” la ubicación de la periodista en el campo.
La “pierodista” ofendida se llama Sara Carbonero y el “pierodista” ofensor Fernando González Urbaneja; aunque a mí, como a mi peque, se me traba la lengua y tiendo a denominarle, sin rubor y con absoluto conocimiento, “Comadreja”. Lo que ni me enorgullece, ni me arranca sonrisa alguna.

3 comentarios:

  1. Ya me iba yo y sales tú a estas horas intempestivas retrasando el momento de abrazar a Morfeo. Imposible hacerlo sin antes dejar un comentario.
    Veo poco la cosa deportiva pero si las noticias de las tres y hago zaping por todas las cadenas. En una de ellas descubrí a una chica de impresionantes ojos azules que hablaba de deportes y alabé su belleza. Los entendidos en esas leerías pronto me pusieron en antecedentes y así me enteré que era la nueva novia del Iker.
    Una, que es mas de la cosa de lo sobrenatural y sus parafernalia, confundió personas y me dije “pues que guarrete el tio”
    Luego me enseñaron un video donde el Iker no era mi Iker y lo volví a subir a la burra. En cualquier caso el video mostraba a una pareja joven de lo más fogosa, haciéndose toda clase de arrumacos a los que nada tengo que objetar. Sin embargo, esas imágenes pululan por ahí y pueden ser vistas por cualquiera. El, el Casillas, ha demostrado su valía como potero. Pero ella, hasta hace poco no era mas que una desconocida. Eso si, guapa, joven, mujer y profesional. No es fácil que se le perdone tal afrenta, así que no me extraña que le salgan comadrejas.
    Si mal no recuerdo a Mari Carmen Izquierdo también le salieron unos cuantos en su época, aunque no recuerdo cual era la excusa que pusieron entonces para machacarla, …o no quiero recordarla.
    Un beso.

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  2. Poco que decir, todo es un número más de la misma función circense.

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  3. Eauphelia, las horas son igual de intempestivas para ambos. Un bico.

    Jesús, algunos quieren convertir, incluso la propia cadena de televisión, esto en una función circense, pero creo que no lo van a conseguir. Salud.

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