sábado, 18 de febrero de 2017

¿Para qué sirve la Administración?

No es una pregunta recurrente. Y la respuesta es obvia. Pero los hechos se empeñan en demostrar lo contrario. 
¿Para qué sirve la Administración? Para administrar. Para gestionar en beneficio de los administrados. 
Esa es la teoría, pero en Jaén, la práctica nos demuestra que los administrados cuentan poco o nada y que priman otros intereses.
¿Un pabellón de deportes nuevo? Y un teatro en condiciones, un estadio olímpico, un circuito de fórmula uno y… la luna, lunera, cascabelera. Y hasta un toro que se enamore de ella. Quiero todo eso y más para esta ciudad y esta provincia. 
Pero ¿no hemos aprendido con el tranvía no tranvía o con el Real Jáen? ¿Eso son prioridades? ¿En una ciudad con calles donde ya no hay baches, hay abismos; donde no se abre un centro de salud porque carece de accesos y se propone una gymkana; donde el patrimonio se desploma porque no se invierte en su conservación y cuando se hace se deja a medias y cerrado al público?. 
¿Han pasado últimamente por el Bulevar? El ayuntamiento dice que ya se puede acceder al centro de salud y que si acaso ya terminarán la calle un día de estos. Vayan. Échenle un vistazo y piensen en personas enfermas, en personas mayores, en niños en carritos, en personas con muletas o en silla de ruedas. Y luego si quieren algunos, defiendan lo indefendible. 
Eso sí, la fórmula ya la conocen, proponemos construir hasta pirámides, pero que las paguen otros. Y la culpa siempre es del que está en frente, ya sea con el pabellón de deportes o con la cantera de la Fuente de la Peña. 
Los ciudadanos claman, poco a poco, pero van haciendo oír su voz. Todavía no llegamos a lo de Granada, pero al menos ya nos desperezamos. La respuesta de las administraciones, yo no he sido, a mí que me registren. 
Tenemos un alcalde florero, tres concejales con etiqueta de precio de venta al mejor postor y delegados junteros que ni están ni se les espera y otros más pendientes de salir en la foto que de los administrados. Y por si eso fuera poco ahora gozamos también de un secretario de Estado que se pasea y fotografía por estos lares después de contribuir a la bancarrota de la ciudad. 
¿Para qué sirve la Administración? La respuesta es obvia, pero igual la pregunta es otra ¿para qué nos sirven los administradores? Ya sabemos de dónde venimos, sería menester que empecemos a tener claro a dónde vamos.

Artículo emitido en SER Jaén, "La Colmena", el 16 de febrero de 2017.

No hay comentarios:

Publicar un comentario