lunes, 16 de febrero de 2015

El poeta del Norte

El hombre del Norte mira a los hombres del Sur. El poeta del Norte escribe de los hombres del Sur. Versos que nacen donde penan los hombres presos de sus ideas. El hombre del Norte, agua salada y viento; los hombres del Sur, tierra y sol en la piel.
Aquellos hombres son la semilla de los hombres de hoy. Los que no preguntan, los que no se quejan, los que no se rebelan. Hombres de luz que no dejan sombra. Frágiles. Sin odio y sin perdón. Indiferentes.
Y aún así hallan refugio en las estrofas. Rescatados de la muerte y el olvido por el poeta del Norte; lejos del calor, los campos de trigo y olivar son huéspedes de sus versos. Habitantes eternos del “Libro de las Alucinaciones”.
La poesía como arma cargada de futuro. El refugio del rebelde. La memoria de los pueblos. Y el poeta, férreo.
También el Sur tiene y tuvo sus poetas. Góngora, Cernuda, Aleixandre, Juan Ramón, los Machado, Lorca, Alberti, Caballero Bonald, García Montero, Álvaro Salvador, Manuel Lombardo, Ruiz Amezcua, Javier Egea… Y los que procedentes de otras tierras como Valente y Miguel Hernández fueron y se sintieron sureños. Y todos, como el poeta del Norte, quisieron despertarnos “del pasado de frío, de los cerrojos del futuro”.

 "‹‹Las cosas son como son,/ como siempre han sido, como/ han de ser mañana... Ojú,/ que frío...›› Los andaluces...". Los andaluces, "El Libro de las Alucinaciones", José Hierro.

sábado, 14 de febrero de 2015

Elogio de la locura

No hay cura para la ensoñación más allá de darse de bruces con la realidad. Y aún así, en ocasiones, la realidad no es más que otra ensoñación. Hay un lugar en el cual no hay línea divisoria apreciable que separe ese mundo irreal del real, aunque es posible que haya un espacio para la intersección, donde ambos mundos confluyen en un territorio que indiscutiblemente podría ser de lucidez.
En todo elogio a la locura hay sin duda una evocación a Erasmo, pero en lo referente a la poesía yo hallo la referencia en Panero. Ahora de nuevo me sumerjo en unos versos de Elogio de la locura, en el poemario “Amorexia”, de Miguel Agudo Orozco, y alzo la vista sin esperanza de ver, pero buscando esa manada de penas paciendo en el preámbulo del abismo.
Conocí a Panero en un psiquiátrico de Las Palmas sin saber que era Panero. Tuve con él una breve conversación en la que él preguntaba y respondía, hasta que el alboroto causado por dos hermanos hospedados en el mismo centro nos interrumpió, provocó su marcha y la ruptura abrupta de aquel monólogo disfrazado de conversación.
Una enfermera me rescató de mi ensimismamiento. Me contó la historia de aquellos dos hermanos, pero me mantuvo en la oscuridad respecto al poeta. Tiempo más tarde, ya en Madrid, las páginas de un diario me revelaron la identidad de aquel locuaz compañero de pasillo.
Es curioso, porque pensé que Panero estaba allí de visita como yo. Y sin embargo, años más tarde, en Jaén, al conocer en la parada del autobús a otro poeta, Manuel Lombardo, creí que era un loco del centro hospitalario de enfrente. En este caso la conversación fue diálogo y durante la misma se presentó y quedó aclarado el equívoco y evidenciado mi ojo clínico en la materia.
Así que desde entonces evito hacer diagnóstico alguno y si alguien se interesa por mi estado mental, siempre tengo la excusa de que nací en febrero. 

"Cuando ya nada puede hacerse,/ se puede/ perder la cabeza,/ la esperanza,/ encontrarla,/ esconderla y contar hasta cien,/ mirar hacia otro lado/ del abismo,/...". Elogio de la locura, "Amorexia" (2014), Miguel Agudo Orozco. 

martes, 3 de febrero de 2015

La hora de los ciudadanos

El próximo 22 de marzo Andalucía celebrará Elecciones Autonómicas por decisión de su presidenta, tras romper el pacto de gobierno PSOE-Izquierda Unida y ante la amenazante sombra de Podemos.
Los primeros sondeos, pese a la encuesta interna manejada por el PSOE que lo sitúa a 4-5 escaños de la mayoría absoluta, no avalan la decisión de Susana Díaz. Son solos sondeos, pero marcan tendencias. Tanto ABC como El Mundo otorgan la victoria electoral al PSOE, sin mayoría absoluta, y a expensas de acuerdos de gobierno con el PP o Podemos.
El analista electoral, Jaime Miquel, en un estudio realizado para El Español, la nueva criatura periodística de Pedro J. Ramírez, también da como vencedores a los socialistas con el 30,6 por ciento de los votos, pero con la pérdida de 7 escaños respecto a 2012. Es decir, 400.000 votos menos que en los anteriores comicios, que se suman a los 600.000 perdidos en las últimas elecciones autonómicas y muestran un partido a la baja.
Populachera, falta de preparación y sin trayectoria laboral más allá de la política, el estudio evidencia que el efecto Susana Díaz no es tal y revela su condición de instrumento político; primero, en manos del anterior presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, para que no le movieran el sillón desde Madrid, y ahora, como marioneta de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero (cómo era aquello de la política y los extraños compañeros de cama) para mover el sillón en Madrid.
El PP tampoco sale bien parado del estudio, con el 27,8 por ciento de los votos y la pérdida de 13-14 escaños frente a los 50 obtenidos en 2012. Paga la factura de contar con Moreno Bonilla, un líder desconocido para la mayoría de los andaluces, y sobre todo, el desgobierno de Rajoy y los escándalos financieros del PP.
Tampoco sale victoriosa IU. Perdería 2 escaños, que comparados con las pérdidas de PSOE y PP no parecen mucho. Pero sus 10 escaños no le permitirían pacto de gobierno alguno y dejan el sorpasso en manos de Podemos; la gran novedad de estos comicios, que obtendría 22 escaños y como ya hiciera en las Europeas frena las expectativas de IU y de UPyD. Los de Rosa Díez apenas aspiran a un parlamentario, que ni suma, ni resta, ni nada de nada.
Andalucía se convierte así en el laboratorio nacional donde veremos si hay freno para Podemos o si toma forma ese proyecto de ¿gobierno de salvación? entre PP y PSOE, que garantiza el futuro del PP y deja en el aire el del PSOE. De ser así, se da la paradoja de que Andalucía si quiere seguir siendo socialista, tendría que dejar de votar al PSOE. Tendrán que hablar los ciudadanos.
¿Y en Jaén? Pues casi lo mismo de siempre. El PSOE, 5 escaños. El PP, 4. E IU, 1. Y una entrada tímida de Podemos, con un diputado, en comparación con el resto de provincias andaluzas. Se ve que los de Pablo Iglesias tienen poco calado entre los olivos. Será el monocultivo. O una cuestión sociológica. 

Artículo emitido en SER Úbeda el 3 de febrero de 2015.